Nuestra Historia

 

   Con una matrícula de 62 estudiantes y 6 profesores el 1 de octubre del 1962, se inicia el Colegio Secundario Adventista de Venezuela (COLSEVEN), En el Limón de Maracay, Estado Aragua. Así bajo la dirección del abogado Antonio Ceballos, Servicios al Estudiante comienza lo que posteriormente se conocería como el Instituto Vocacional de Venezuela (INSTIVOC). En el año 1964, con el pastor Carlos Schmidt al frente del proyecto educativo se inician las obras de construcción de las instalaciones de INSTIVOC, en el caserío de Las Lagunas del Municipio Nirgua, con una matrícula de 166 estudiantes.

 

   Desde ese momento y hasta la fecha INSTIVOC ha estado impartiendo una educación integral a jóvenes de diferentes partes del país. Fue realmente la voluntad de Dios la creación de un Colegio Superior para educar los líderes de servicio de la recién formada Unión Venezolana Antillana. Inicialmente fue llamado INSTIVEN (Instituto Universitario Eclesiástico Adventista de Venezuela), comenzando sus actividades en el mes de marzo del año 1990, ofreciendo únicamente el Programa de Formación en Teología, auspiciado por el departamento de Educación Teológica de la Iglesia Adventista del Séptimo Día.

   Pero esto no era suficiente, se seguía soñando con un Colegio de Educación Superior donde se pudiera ofrecer otras oportunidades de estudio para los jóvenes universitarios de la Iglesia y de otros que quisieran aprovechar las bondades de la Educación Adventista. Comenzaron a hacerse las diligencias necesarias y es así como el 26 de julio del 1999 nace oficialmente El Instituto Universitario Adventista de Venezuela (IUNAV), por Decreto presidencial N° 227, de fecha 23 de Julio de 1999, publicado en Gaceta Oficial N° 36.750. Su creación fue patrocinada por las autoridades educativas de la Iglesia Adventista del Séptimo Día.

 

  Este proyecto se presentó ante el Ministerio de Educación Superior, con el fin de ofrecer una educación que permitiera lograr el desarrollo armonioso de las facultades físicas, mentales y espirituales de los jóvenes de cualquier nacionalidad, sexo, clase social o filosofía religiosa. Todo esto es posible gracias a los programas de docencia, investigación y extensión tendientes a la formación universitaria por los que se rige el Instituto Universitario Adventista de Venezuela (IUNAV).

#ComoIUNAVNinguna

Nuestra Identidad

Misión

Misión

“Formar educandos al servicio de Dios y la sociedad en integridad, amor y excelencia, haciendo uso óptimo de los recursos disponibles, a través de un personal comprometido en la filosofía educativa adventista”
Visión

Visión

“Ser reconocida como una Institución de alto nivel educativo, integrando los principios cristianos con el desarrollo armonioso de todas las facultades del educando, comprometida con la transformación del ser humano como el ideal más noble”
Filosofía

Filosofía

IUNAV resume la Filosofía educativa en el siguiente párrafo: “La Iglesia Adventista del Séptimo Día reconoce que Dios, el Creador y Sustentador de la tierra y de todo el universo, es la fuente del conocimiento y de la sabiduría. A su semejanza, Dios creó al hombre perfecto. Debido al pecado, el hombre perdió su condición original y la educación cristiana, al promover la fe en Cristo, procura restaurar en él la misma imagen de su Hacedor, fomentar en el hombre una dedicación inteligente a la obra de Dios en la tierra y proporcionarle una preparación práctica para un servicio concienzudo a sus semejantes.”

Valores

Amor

Amor

La manifestación del amor en su forma mas pura.

Servicio

Servicio

Acciones desinteresadas a favor del prójimo por amor a Cristo.

Integridad

Integridad

Rectitud, honestidad, en la vida del cristiano.

Excelencia

Excelencia

Que se manifieste en el buen desempeño de todo lo que haga.

Objetivos Institucionales

  • Lograr que, a través de los programas educativos, los estudiantes obtengan un desarrollo armónico de su personalidad y puedan ejercer plenamente todas sus capacidades, con una actitud crítica y de responsabilidad hacia el prójimo y el medio ambiente.
  • Ofrecer un proceso de enseñanza-aprendizaje que permita al estudiante lograr el más alto nivel académico y posteriormente una vez egresado en alguno de los programas de estudio, puedan satisfacer las distintas demandas que exige la sociedad desde el punto de vista laboral y de acuerdo a los planes de desarrollo de la nación.
  • Ofrecer programas que promuevan actividades técnicas y manuales, mediante las cuales los estudiantes tengan la oportunidad de desarrollar sus habilidades prácticas.
  • Proyectar la acción académica, cultural y espiritual a la comunidad, para contribuir al progreso y desarrollo de la misma.
  • Enriquecer y difundir la cultura con la incorporación de ideas y valores cristianos.

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